No solo en la industria, también en el sector terciario e incluso en el de la edificación, el aparellaje eléctrico y electrónico es omnipresente. Desde el equipo de ascensores en un bloque de viviendas al cuadro eléctrico de un restaurante o el pupitre de mando de la más compleja maquinaria, el uso de la electricidad no se concibe sin alguno de nuestros elementos.
Interruptores seccionadores y desconectadores en carga.
Interruptores automáticos de potencia en caja moldeada o de corte al aire o al vacío.
Contactores principales, auxiliares, de acoplamiento, combinaciones e interfases.
Relés de sobrecarga, de tiempo, de vigilancia (electrónicos); protección por termistores.
Arrancadores electrónicos para motores.
Pulsadores, lámparas de señalización, teclado de membrana. Interruptores principales de mando y parada de emergencia.
Detectores de proximidad, finales de carrera. Técnica de seguridad, aparatos de señalización.
Regletas de fusibles, fusibles para cuadros, armarios de distribución y mando, bornas de conexión.
Transformadores de mando, de intensidad, de tensión, de regulación, estabilizadores.
Aparatos de maniobra con capacidad de comunicación, interruptores con capacidad de comunicación.